SIN EMOCION

8:42 a.m.

He despertado sin emoción, sin expresión, con un malestar indescriptible que empieza en mi garganta y termina en mi pubis. Es como la angustia y el desconcierto bien revueltos con los huevos del desayuno. Pienso mucho en las cosas que he escuchado decir. Te he escuchado demasiado y tenías razón, me faltó emoción y carácter, pero el miedo de alejarte me hizo complaciente y tus devaneos cognitivos me ponían cada vez más lejos de todas la sensaciones que experimentaba a tu lado. Y me volví una alpinchista emocional, sólo dediqué mi cuerpo a lo que quería de ti. No sé, ¿realmente querías algo más?, si experimentaste todo lo que no te gustaba de mi ¿porqué tanta exigencia? ¿para llegar a amar algo por algunas horas?. Ahora estoy en el limbo de la intensidad y realmente llegamos a un punto donde se esfumaron nuestros deseos de amistad y compañía. Me quedo con tus dulces besos en la frente y con la fuerza de tus delgados labios. Gracias por el viaje.